El valor de los extras

Bienvenidos a lo que orgullosamente se puede definir como las historias de personajes que nadie recuerda y a nadie le importan, si quieren el contexto de este chiste tendrían que leer esta entrada.

Llamarlos "extras" es un poco despectivo, pero "El valor de los personajes secundarios, terciarios y circunstanciales", era demasiado largo para meterlo en cualquier lado.

Esta iniciativa nació para el fandom de Naruto, aunque al igual que Ciclo Hórrido, pienso que puede aplicar para cualquiera que adolezca de lo mismo: personajes desperdiciados. La idea en general es sacarlos del olvido en el que los metió incluso su propio autor.

Pongo un poco de anécdota.

Cuando recién empecé a leer en el fandom de Naruto, era muy, MUY activa como lectora, podía pasar horas devorando historia tras historia. Y por aquél entonces era tan fan de Sakura que mientras ella fuera prota, no discriminaba: todo género y cualquier ship (sí, cualquiera). Sin embargo, llegó el momento en que sentí que ya había leído la misma historia al menos cuatro veces, y entonces, tuve una revelación: podía quitar los filtros y leer algo más.

Y para sorpresa de nadie, las posibilidades se multiplicaron.

Fue en este periodo que casi a tropiezo, me encontré con una historia (tristemente desaparecida) que trataba sobre dos personajes que, francamente ni me acordaba: Izumo Kamizuki y Kotetsu Hagane.
Fue tal la impresión que directamente escribí "Te odio", donde los mismos recepcionistas se embarcan en una misión que pondrá a prueba su temple.

De ahí seguí explorando posibilidades, y empecé el proyecto más importante en este sentido: Cuentos de Ichiraku, la historia de Teuchi Ichiraku, ese hombre amable que fue de las primeras personas en tratar a Naruto como ser humano.
Empecé a considerar cosas como, si Naruto es huérfano básicamente desde que nació, y te plantean que TODA la aldea lo odiaba, ¿cómo diablos no se murió? Siempre fue evidente que, pese a que te quieren vender la idea de que Hiruzen lo protegió, realmente no lo veo cambiándole el pañal, ¿obligaba a un ANBU? ¿Los amenazaba con quitarles la licencia? Repito, según el argumento TODOS lo odiaban.
Muchísimo más adelante se desliza la idea de que Mikoto quería adoptarlo, pero al final no lo hizo.

¿Desde cuándo vivía independientemente? ¿Hiruzen básicamente lo botó en un departamento desde que pudo caminar solito? ¿Cómo vivió hasta entonces? ¿Cocinaba desde los 2 años? ¿Por qué Kakashi lo abandonó si según su desarrollo de personaje los que abandonan a sus amigos son menos que escoria? ¿Por qué Jiraiya si tan cercano era a Minato tampoco le pasaba siquiera pensión?

Con el paso de los capítulos en manga y anime saltaron algunas respuestas, muchas veces a medias tintas o con una distorsión de la realidad bien intensa por parte de quien lo cuente. Y a medida que se iba expandiendo la trama, saltaron más y más dudas. Ni hablar de los rellenos que solo agrandaban los huecos que ya estaban.

Cabe mencionar que pese al nuevo panorama no había mucho realmente que no fuera shippeo, aunque encontré afinidad con algunas historias como Las crónicas perdidas de Konoha, en las que, pese a la historia de parejitas de por ahí, se nutre de muchísimos detalles que francamente aprecio mucho.

Los fics que escribí en este periodo ya se enfocaban más en encontrar un huequito para rellenar, sin alterar la trama original, o al menos hacerlo lo menos posible. Y la siguiente gran duda me llevaba a quién iba a contar la historia, y entonces aparecieron estos personajes que siempre han estado ahí, pero no suelen usarse, es decir, no son los protagonistas, pero tienen una historia que contar (de ahí el slogan).

Usé a Suzume Namida para una anécdota sobre la soledad del pequeño Sasuke en El arte de las musas, porque tanto canon como fanon tienden a retratar a Sasuke como un ridículo exagerado y a Itachi una víctima inocente.

Ibiki Morino nos habla sobre Anko, luego de que Orochimaru dejara la aldea en ¿Por qué Anko no habla? porque más allá de los exámenes, Kishimoto se acordó de eso hasta que necesitó traer de vuelta a Orochimaru.

La mayoría de las inquietudes que me dejaba el manga las plasmé en Cuentos de Ichiraku, aunque con el tiempo algunas cosas quedaron completamente en otro rumbo.

Con el tiempo, me di cuenta de que ya casi no leía fics de parejas, o al menos que trataran exclusivamente del desarrollo de una relación, y empezaba activamente a buscar tramas que fueran un poco más allá, que resolvieran dudas que quedaban flotando en el canon.

No puedo dejar de mencionar dos historias con las que me di cuenta de que no estaba sola en esa exploración: Bajo las cicatrices y Persiguiendo un sueño, fueron, además, un segundo parteaguas en mi camino como ficker de Naruto: el tema de los ANBU, y con eso, el hueco argumental más infame del canon.
¿Qué es un ANBU?
Se les introdujo como una unidad élite, algo de lo que tener miedo, que son los más fuertes, lo mejor de lo mejor de la aldea, para seguidamente no hacer absolutamente nada, salvo caer como moscas.

Hoy día los ANBU son más meme que nada, pero aun así me gusta trabajar con ellos, no entendiéndolos como se planteó de la élite, sino por lo que su nombre indica: una unidad de inteligencia y eliminación, que no implica ser fuerte en sí, sino hacer algo que las fuerzas regulares no harían: secuestros, asesinatos y demás cosas que le quitarían lo inmaculado a la aldea de residencia del protagonista.

Aquí es cuando adopté como favoritos a Ibiki Morino y Yūgao Uzuki.

Pienso que, de entre todos los personajes, Yūgao refleja mejor mi punto con el desperdicio de personajes. 

La recordarán como una de las pocas kunoichi adultas vistas, y la única canónica, tanto en manga como en anime, que forma parte de ANBU (bueno, hay otra en el manga, pero ni nombre le pusieron y en el anime la omitieron, cediéndole el lugar a Yūgao). Estuvo bajo el mando de Kakashi cuando este fue capitán, y oficialmente, es reconocida por su estilo de kenjutsu (técnica de espada), ser sensor, y según el relleno, también médico.

Se sabe que llegó a ser líder de equipo, aunque no hay detalles sobre si fue ascendida a capitana en algún momento (que no lo creo, según el relleno, que es donde se ahondó en ella, se retiró de ANBU, y en el manga en realidad ya no aparece)

Mostrada como una mujer bella que cuida su apariencia, pero mantiene un aire de frialdad y distancia profesional, tengo que reconocer que, aunque me llamó mucho la atención el diseño y que sea ANBU, en realidad la amé por Persiguiendo un sueño.

Dentro del canon, como muchos personajes (y no hablemos específicamente de mujeres, sino personajes en general), tiene un planteamiento muy sólido, pero todo lo demás queda al aire.

Es una viuda de la invasión del sonido, aunque aquí quiero aclarar que su carácter frio no es producto de este evento, ella era así desde antes, y me parece importante para no encasillarla en el papel de amante trágica.

La cantidad de cosas que pudo pasar esta mujer es una cartera basta de oportunidades de trama que muy pocas veces se toca en fanfiction.

Creo que esto ya se alargó mucho, y creo que me separé bastante de mi objetivo que simplemente invitar a experimentar con personajes fuera de la zona de confort.

Actualmente el fandom ha perdido bastante actividad, pero tengo la firme determinación de acabar con los proyectos que tengo pendientes, muchos en esta campaña.

En fanfiction net, que es donde la empecé, está la comunidad y el foro... muy abandonados, pero es lo que hay.

En Ao3 por supuesto que está como colección abierta, por si alguien se quiere sumar.

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